Dormir lo suficiente es importante para la salud de los adolescentes. Con la escuela, las actividades extracurriculares y el tiempo que pasan con amigos y familiares, puede ser difícil que los adolescentes duerman lo suficiente.

¿Cuánto debe dormer mi hijo adolescente cada noche?

Su hijo adolescente debe dormir entre 8 ½ y 9 ½ horas cada noche, incluidas las noches de la semana escolar.

Mi hijo adolescente se queda despierto hasta tarde y duerme hasta el mediodía los fines de semana, ¿es normal?

Sí. Los adolescentes tienen un ritmo circadiano o ciclo sueño-vigilia diferente al de los adultos. Los cuerpos de los adolescentes naturalmente hacen que permanezcan despiertos hasta tarde por la noche y que duerman hasta más tarde por la mañana. Esto se debe a que los adolescentes atraviesan la pubertad o cambios que hacen que sus cuerpos se conviertan en cuerpos adultos. Su hijo puede recuperar el sueño perdido durmiendo hasta tarde los fines de semana.

¿Cómo afecta a mi hijo adolescente la pérdida de sueño?

La pérdida de sueño puede afectar a los adolescentes de diferentes maneras, entre ellas:

  • Mayor riesgo de obesidad y aumento de peso. La pérdida de sueño disminuye la capacidad del cuerpo de quemar grasa y liberar las hormonas que controlan el hambre.
  • Menor capacidad para lidiar con el estrés. La pérdida de sueño puede hacer que los adolescentes reaccionen de manera más negativa ante el estrés. También puede hacer que los adolescentes tarden más tiempo en recuperarse del estrés.
  • Mayores problemas de comportamiento o salud mental. La pérdida de sueño puede hacer que los adolescentes estén malhumorados, ansiosos o depresivos. Si su hijo adolescente ya sufre de ansiedad o depresión, la pérdida de sueño puede empeorar estos problemas.

¿Cómo puedo ayudar a mi hijo adolescente a dormir más?

A continuación hay algunos consejos para ayudar a su hijo adolescente a dormir más:

  • Limite el uso de dispositivos electrónicos entre 1 y 2 horas antes de la hora de acostarse de su hijo adolescente. Los dispositivos electrónicos, como teléfonos celulares, tabletas y computadoras, tienen luz azul. La luz azul puede suprimir o interrumpir la liberación natural del cerebro de melatonina, una hormona que le indica al cuerpo cuándo ir a dormir y cuándo despertarse. Alejar los dispositivos electrónicos puede ayudar a regularizar los niveles de melatonina de los adolescentes para que duerman más.
  • Aliente a su hijo adolescente a dormir entre 8 ½ y 9 ½ horas cada noche, incluidas las noches de la semana escolar. Puede hacer esto hablando con su hijo adolescente acerca del establecimiento de un horario regular para irse a dormir que pueda seguir las noches de la semana escolar.
  • Limite la cantidad de cafeína que consume su hijo adolescente durante el día. La cafeína puede mantener a los adolescentes con energía hasta tarde en la noche, especialmente si consumen cafeína tarde en el día. Intente limitar la cantidad de cafeína que bebe su hijo adolescente después del almuerzo para que la cafeína deje el sistema antes de la hora de acostarse.
  • Trabaje en conjunto con la escuela de su hijo adolescente para que comience el día más tarde. Comuníquese con la escuela de su hijo adolescente para fomentar un comienzo del día tardío más acorde a los ciclos de sueño naturales de los adolescentes.
  • Trate los problemas de salud mental de su hijo adolescente. Los problemas de salud mental, como la ansiedad y la depresión, pueden dificultar el sueño. Hable con el médico de su hijo para ayudar al adolescente con cualquier problema de salud mental que pueda estar padeciendo.
Rev. 8/2015