Las medidas de seguridad aplicadas durante la pandemia del COVID-19, como el aislamiento y el distanciamiento social, han hecho que muchas personas experimenten un deterioro de su salud mental.

Uma Naidoo, MD, directora de Psiquiatría Nutricional y Metabólica de Massachusetts General Hospital y autora de This Is Your Brain On Food, confirma que ha observado un aumento en el número de pacientes que buscan tratamiento de salud mental, concretamente para la depresión, la ansiedad, el insomnio, y los traumas.

"Creo firmemente que la pandemia silenciosa está en la salud mental", dice. "Aunque sea algo de lo que mucha gente no hable".

Y, muy a menudo, explica, los que están trabajando en su salud mental recurren a la comida para autoconsolarse y encontrar apoyo emocional.

Como pionera mundial y voz principal en psiquiatría nutricional y fundadora del primer servicio clínico estadounidense en este ámbito, la Dra. Naidoo trabaja con los pacientes para mejorar su estado de ánimo y su salud mental mediante la nutrición.

Aquí, la Dra. Naidoo comparte cómo aprovechar la nutrición para apoyar su salud mental, durante y después de la pandemia del COVID-19.

La conexión intestino-cerebro

El microbioma humano, también conocido como entorno intestinal, es una comunidad de bacterias saludables para el organismo. La alimentación afecta este entorno intestinal y, a su vez, la función del cerebro y el estado de ánimo. Cuando microorganismos beneficiosos ingresan en este entorno a través de alimentos saludables, se descomponen en sustancias positivas que alimentan el cuerpo y el cerebro. Sin embargo, cuando se introducen alimentos poco saludables, se descomponen en sustancias negativas que superan a las bacterias buenas y crean inflamación en el intestino, lo que, según las investigaciones, ha demostrado ser la base de varias condiciones de salud mental, incluyendo la depresión y la ansiedad.

"En términos sencillos, comer alimentos poco saludables, como los procesados o la comida rápida, es más tóxico para nuestro cuerpo. Los microorganismos malos del intestino empiezan a prosperar porque se los nutre con alimentos que les gustan y superan a los microorganismos buenos o beneficiosos", explica la Dra. Naidoo. "La alteración del equilibrio bacteriano puede dar lugar a toda una serie de enfermedades".

Mejorar la salud mental con la nutrición

A menudo las personas que sienten ansiedad o depresión pueden recurrir a la comida reconfortante, lo que puede crear malestar en el cerebro y exacerbar esos sentimientos preexistentes.

Para mejorar su salud mental, la Dra. Naidoo recomienda incorporar algunos de estos alimentos a su dieta.

Vegetales

Muchas verduras son grandes fuentes de fibra, y las dietas con alto contenido en fibra se han relacionado con la reducción del riesgo de ansiedad, estrés, y depresión debido al efecto antiinflamatorio de la misma. La inflamación intestinal, afirma la Dra. Naidoo, tiende a ser alta en las personas que sufren estas condiciones de salud mental.

Añadiendo más vegetales en su dieta se puede empezar simplemente añadiendo dos o tres guarniciones de verduras a cada comida, como brócoli, coliflor, o espinacas. Pueden ser frescas o congeladas, siempre que no contengan salsas, azúcares, o sodio. También se puede empezar añadiendo verduras picadas a otras comidas, como tortillas o guisos.

Alimentos fermentados

Los probióticos suelen ser un suplemento; sin embargo, puede añadir probióticos a su dieta con alimentos fermentados que contengan cultivos activos vivos que restauran las bacterias y microorganismos buenos en el intestino para mantener un bioma intestinal saludable.

Incorpore más alimentos fermentados a su dieta con:

  • Pepinillos
  • Kimchi
  • Miso
  • Yogur natural, lácteo o no, con cultivos activos vivos
  • Kombucha

Ácidos grasos Omega 3

Nuestro cerebro necesita grasas para sobrevivir y funcionar; la clave es elegir las grasas saludables. Los omega-3 son ácidos grasos esenciales. Como nuestro cuerpo no puede fabricarlos de forma natural, tenemos que obtenerlos a través de los alimentos que comemos. Tienen un gran poder antiinflamatorio, lo que significa que favorecen la salud del cerebro y reducen los síntomas de la ansiedad.

Encuentre ácidos grasos omega-3 en:

  • Pescados como el salmón, las sardinas, y la caballa
  • Semillas como las de lino, chía, y calabaza
  • Nueces como las castañas del Brasil y las nueces comunes
  • Otros alimentos como el aguacate y el aceite de oliva

Vitamina D

Esta vitamina importante está asociada a la mejora del estado de ánimo, ya que interviene en la desinflamación en el cerebro y en la protección de las neuronas. Según la Dra. Naidoo, el 80% de las dosis necesarias de vitamina D puede adquirirse pasando 10 minutos al sol.

Añada más vitamina D a su dieta al elegir:

  • Leche enriquecida
  • Hongos
  • Salmón

Especias

Las especias son el secreto mejor guardado en el mundo de la psiquiatría nutricional y un superalimento oculto, revela la Dra. Naidoo. Añadir especias a las comidas no solo sirve para potenciar el sabor, sino que muchas pueden potenciar las propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que aumentan la salud del cerebro.

Mezcle estas especias en sus comidas:

  • Cúrcuma con una pizca de pimienta negra para activar un ingrediente importante de la cúrcuma llamado curcumina
  • Orégano
  • Romero
  • Jengibre
  • Ajo

Sobre todo, si se padece ansiedad e insomnio, tener una colección de tés a mano puede hacer una diferencia extraordinaria en el manejo de la salud mental.

Algunas de las mejores variedades de té para preparar son:

  • Verde, que contiene un aminoácido llamado L-teanina que puede atravesar la barrera hematoencefálica y tener un efecto ansiolítico. También se ha demostrado que ayuda a las personas a concentrarse, a sentir un impulso de energía, y a reducir la niebla mental
  • Manzanilla, que contiene un antioxidante llamado apigenina al que se le atribuyen efectos antiinflamatorios y calmantes. Añada un toque de jugo de cereza ácida si sufre de insomnio. Si está embarazada, consulte primero con su médico
  • Infusiones de hierbas como la lavanda y la pasionaria, que calman, relajan la mente, y estimulan el cerebro para reducir los sentimientos de depresión

Complementos fáciles de conseguir para el refrigerador y la despensa

La Dra. Naidoo afirma que una de las claves para que una dieta saludable sea sostenible a largo plazo es asegurarse de que se dispone de alimentos fáciles de conseguir que sirvan para la salud del cerebro y del intestino.

"Tener bocadillos saludables disponibles en casa para los días estresantes u ocupados puede ser muy útil", aconseja. "Y si ya vive una vida bastante ocupada, es probable que eche mano de cualquier cosa que esté disponible".

Para utilizar la nutrición como una forma de mejorar su salud mental, añada estos artículos a su refrigerador o despensa:

  • Algo dulce: un plátano “nice-cream”, una manzana con mantequilla de almendras natural, o una barra de chocolate extra amargo
  • Algo salado: chips de col al horno con aceite de aguacate, sal, y pimienta
  • Algo crujiente: 1/4 de taza de almendras, nueces, o semillas de calabaza
  • Algo rápido: Mezcla casera de nueces, semillas, y chips de chocolate amargo

Y si comprar productos frescos le parece una tarea desalentadora, la Dra. Naidoo confirma que los productos congelados son igual de buenos para aportar nutrientes saludables a su intestino y cerebro. Las verduras enlatadas, como las judías verdes, pierden su valor nutritivo; sin embargo, las legumbres y los garbanzos enlatados son proteínas nutritivas, económicas y de origen vegetal que puede añadir a su dieta.

Por encima de todo, la Dra. Naidoo recomienda que los pacientes busquen ayuda cuando experimentan un deterioro de su salud mental. "Es cierto que una dieta saludable puede ayudar, pero es una parte de todo el tratamiento", advierte. "A menudo trabajo con los pacientes para combinar una dieta saludable con otros tratamientos, como la medicación y la terapia".


Translation of "Tips to Improve Mental Health with Nutrition," published on May 4, 2021.