Las series de casos identifican sistemáticamente a la diabetes mellitus como un factor de riesgo del COVID-19 grave. En una rápida actualización de la literatura publicada el 28 de abril de 2020, la Dra. Janaki D. Vakharia, fellow de endocrinología de adultos y pediátrica en Massachusetts General Hospital, analiza ese tema y la pregunta relacionada de si tener el COVID-19 hace que las presentaciones de la diabetes sean más graves.
Datos de observación
En todos los estudios pertinentes realizados en China, Italia y los Estados Unidos, excepto uno, la prevalencia de la diabetes en los pacientes con el COVID-19 fue mayor que en la población general. (La mayoría de los estudios no distinguieron la diabetes de tipo 1 de la de tipo 2).
Además, los pacientes con diabetes parecen tener un mayor riesgo del COVID-19 severo y de muerte. No se ha establecido ninguna relación causal.
¿Cómo podría la diabetes agravar el COVID-19?
Se sabe que la hiperglucemia es capaz de aumentar la gravedad de las infecciones virales. Según estudios in vitro de la influenza, también puede promover la replicación viral.
Otra hipótesis es que la diabetes modula la expresión de la enzima convertidora de angiotensina 2 (ECA2), el principal receptor de la superficie celular para el SARS-CoV-2.
COVID-19 y el control de la diabetes
La infección aguda es un desencadenante conocido de la cetoacidosis diabética. El COVID-19 puede predisponer a los pacientes a una hiperglucemia y cetoacidosis graves como cualquier otra infección aguda o puede aumentar el riesgo de forma única.
Existe la hipótesis de que los coronavirus pueden causar una disfunción transitoria de las células beta, lo que conduce a una hiperglucemia aguda y a una deficiencia relativa de insulina. Esto está respaldado por un estudio de 39 pacientes con SARS sin antecedentes de diabetes. Veinte de ellos desarrollaron diabetes, todos menos dos de forma transitoria. Además, se ha identificado ECA2 en el páncreas de los pacientes con SARS.
Podría desarrollarse un círculo de retroalimentación en el que la infección por el SARS-CoV-2 provoca una hiperglucemia grave, lo que lleva a la elevación de la ECA2 en varios órganos, lo que provoca una mayor entrada del virus y una mayor inflamación.
Conclusiones
Un estudio adicional revelará si se necesitan protocolos alternativos de control de la glucosa en sangre en pacientes con el COVID-19 gravemente enfermos o si los clínicos deben simplemente trabajar con una mayor conciencia de las posibles complicaciones de la diabetes.
Translation of "Link Between Diabetes and COVID-19 Is Credible, but Clinical Implications Are Unclear," published in Advances in Motion on May 7, 2020.